A raíz de los sucesos acaecidos en diciembre de 2019 y todas las consecuencias derivadas por la pandemia de Covid-19, se han transformado muchos de nuestros hábitos. Uno de los más relevantes es la limpieza de nuestros hogares, en primer lugar porque la constante limpieza y desinfección son armas para luchar contra los virus y bacterias de cualquier índole, y en segundo término porque estos sucesos nos han llevado a pasar más tiempo en nuestra casa, dedicándole mayor cantidad de horas a mantenerla ordenada y limpia. En este rubro también se han marcado ciertas tendencias que continuarán cobrando notabilidad; aquí se detallarán algunas de las principales a considerar.
Los hábitos de consumo en cuanto a productos de limpieza se han transformado desde que inició la pandemia en todos nuestros países. Los compradores ya no sólo se guían por un empaque deslumbrante, una recomendación familiar o un aroma cautivante, desean productos eficientes, que garanticen un uso efectivo contra gran cantidad de virus. Por ello no es de extrañar que consulten a mayor detalle el etiquetado y los componentes de cada producto.
El tiempo de cuarentena funcionó a muchas personas para redescubrir el espacio de su casa, para valorarlo y aprovecharlo; en ese tenor, el cuidado del hogar se ha convertido en una extensión del cuidado personal para muchos: habitar un espacio limpio, cómodo y tranquilo, atenderlo como si fuera parte de nuestro cuerpo, nos permite ejecutar mejor nuestras actividades diarias. Por lo mismo, la variedad de productos que se pueden encontrar en la mayoría de las casas es cada vez más amplia: productos específicos para ciertas áreas y tareas, que facilitan la limpieza de ciertos espacios o cuentan con algún agregado a diferencia de sus competidores. Así, las toallitas sanitizantes, toallas de un solo uso, los limpiadores de cristales o ciertas superficies como madera, o los productos especializados para mascotas cobran relevancia debido a su particularidad. En este apartado, la especificidad y, sobre todo, la practicidad son las cualidades que marcan la pauta.
Por otro lado, la limpieza del hogar tampoco puede desentenderse de los compromisos ecológicos y ambientales. Si un producto muestra excelentes resultados en cuanto a limpieza pero sus componentes son dañinos para el medioambiente, no contará con el apoyo de los consumidores, aunque sus características de limpieza sean excepcionales. Algunos temas como el consumo excesivo de agua o las emisiones de carbono destacan entre las principales preocupaciones de los compradores. Así que los investigadores tendrán tarea pendiente, pues el uso de estos productos y su relación con la salud y el ambiente estará en la mira de consumidores y autoridades.
Otro punto a destacar es el empaque: además de que contenga información que comunique de manera oportuna las cualidades del producto, la innovación puede marcar la diferencia. En sintonía con el cuidado medioambiental, empaques reciclabes o biodegradables sumarán a las cualidades de los productos para el hogar, así como los diseños novedosos o funcionales.
Ya sea como proveedores de estos productos, desarrolladores o simplemente como compradores, mantenerse informados es la mejor herramienta para cuidar nuestro hogar y, de igual manera, nuestra salud y bienestar.
